lunes, 23 de diciembre de 2013

¡FELICES FIESTAS!

Desde el Gabinete de Fisioterapia Getsemaní Úbeda queremos, a través del blog, transmitiros nuestros mejores deseos para las fiestas navideñas . Esperamos que en el año que está a punto de comenzar podáis cumplir todos vuestros propósitos y, sobre todo, mucha salud. Nosotros estaremos, como siempre, a vuestra disposición para ayudaros a conseguirlo.

La clínica estará cerrada los días 24, 25, 31 de Diciembre así como el 1 y 6 de Enero. El resto de días podéis encontrarnos en la consulta o contactar con nosotros por teléfono, correo electrónico, este mismo blog o en nuestras páginas de Facebook (Fisioterapia Getsemaní Úbeda) y Twitter (@FisioGetsemani)

¡¡FELIZ NAVIDAD Y FELIZ 2014!!



jueves, 5 de diciembre de 2013

Infiltraciones: ¿una verdadera solución?

¡Hola a tod@s! Después de hablar en los últimos posts sobre algunas lesiones comunes que suelo ver en mi consulta (temática que continuaremos más adelante), esta vez os quiero hablar de una técnica invasiva que tiene como finalidad la eliminación del dolor: las infiltraciones. Sus pros y sus contras.

 Si habéis tenido o conocéis de alguien que padezca problemas en alguna articulación (rodilla, hombro...) sabréis exactamente a qué me refiero. Además, es común escuchar en los medios de comunicación que a un deportista profesional se le ha "infiltrado" para poder participar en una competición determinada. Pero, ¿es una técnica realmente eficaz? ¿Qué efectos a corto y largo plazo puede tener? ¿Es una verdadera solución al problema?

foto: tutraumatologo.com


¿En qué consiste una infiltración?

Se trata de una técnica invasiva que consiste en la aplicación de forma local, a modo de inyección, de una mezcla de corticoides y anestésicos con la finalidad de eliminar o aliviar dolores musculares, articulares, tendinosos, etcétera.

¿Qué son los corticoides y por qué se prescriben?

Los corticoides son una sustancia química que, como casi todos hemos oído alguna vez, es en sí misma perjudicial, ya que inhibe la formación de colágeno por el organismo, provocando un deterioro tanto del hueso como del cartílago y aumentando el riesgo de padecer osteoporosis.

Sin embargo, es cierto que esta sustancia tiene un gran poder antiinflamatorio. Por ello, muchos médicos suelen aplicar la técnica de su infiltración ante la persistencia de dolor en algunos pacientes con lesiones. 

Pros y contras 

La infiltración es un método que puede ser efectivo en la calma del dolor.  El peligro es que lo rápido no siempre es lo mejor. Muchas veces, en mi opinión, el médico busca una solución rápida y a la desesperada. No debemos olvidar que el dolor es una señal de alarma de nuestro cuerpo que nos avisa de que algo no va bien; su eliminación no implica que la lesión que lo provoca haya desaparecido, por lo que ésta puede agravarse e incluso cronificarse. Este es el caso que comentábamos al principio del post de deportistas profesionales que se infiltran para una prueba concreta y, posteriormente, pueden ver empeorado el pronóstico inicial por "forzar la máquina".

Además, existen efectos secundarios que pueden hacerse presentes. Los restos de corticoides quedan depositados y permanecen en el organismo durante un largo periodo de tiempo, como se ha podido contrastar en estudios científicos, y como me transmite en multitud de ocasiones un colega traumatólogo, acostumbrado a ver esta problemática habitualmente en su consulta.

¿Cuándo y cuántas se pueden aplicar?

Esta técnica, SIEMPRE pautada por un médico especialista, no puede aplicarse habitualmente ni en un número indefinido sino que es una opción muy concreta y puntual. Tanto el número de infiltraciones como el intervalo de tiempo entre éstas debe ser determinado por el propio médico.

¿Son recomendables?

En mi opinión como fisioterapeuta, la aplicación de las infiltraciones se debe llevar a cabo en aquellos pacientes en los que el dolor no remite, siempre y cuando se le informe a la persona de las precauciones que debe tomar. Al igual que la cirugía, la infiltración es el último recurso cuando ya se han probado otros tratamientos conservadores. NO ES RECOMENDABLE NUNCA aplicar infiltraciones sin tener un diagnóstico previo que indique claramente cuál es la patología que provoca ese dolor, ya que se puede enmascarar y agravar.

Recordemos: las infiltraciones son una técnica para aliviar el dolor pero NO SOLUCIONA EL PROBLEMA que lo provoca.

Además, esta técnica se puede compaginar con tratamientos fisioterápicos para aliviar el dolor hasta estabilizar y pasar la fase aguda de la patología. En estos casos, la comunicación entre el médico especialista y el fisioterapeuta es importante.

¿Habéis sido tratados alguna vez con este tipo de técnica? ¿Qué tal su resultado? Recordad que si tenéis cualquier duda más acerca de ella, podéis hacérmela llegar a través del formulario de comentarios al final de este post o en el correo, getsemaniubeda@gmail.com, Facebook (Fisioterapia Getsemaní Úbeda) o Twitter (@FisioGetsemani)

Espero que os resultado interesante

¡Hasta el próximo post!